Le Petit Prince


¡Hola!!

¿Hay alguien ahí??

He tardado en volver de las vacas virtuales, lo sé. Pero ha sido porque quería volver con algo grande.


¿Os ha pasado alguna vez que parece que tienes los astros configurados para que no puedas hacer algo?

Pues con este mueble he tenido los astros perfectamente configurados..... en contra. 

Desde que llegó a casa, directamente desde Las cosas de Mamalara, (una tiendita preciosa que hay en Santiago, id a visitarla si vivís cerca) sólo quería terminarlo cuanto antes para colocarlo en mi rincón.... 

Pues no había forma. 

Cuando no surgía otro trabajo que corría prisa, venía un finde estupendo y nos íbamos a la playa... (bueno eso no es una desgracia, jeje)




Luego llegó el verano...  y mi Sanlucar.



Total que, aunque en cuanto volvimos me puse manos a la obra, ha pasado medio mes.

Como lo tuve taaanto tiempo parado, cada vez que lo veía... lo veía terminado de un modo diferente.

Le dí toooodas las vueltas que se le podían dar... 

        






Durante las vacaciones pensé que podía quedar bonito escribir en cada cajón una frase que me gustase.

En un principio bastaría con que me resultasen bonitas o motivadoras...

De pronto lo ví clarito: escribiría en cada uno de los cajones frases de El Principito. 

Así busqué mi libro, volví a leerlo (en francés que es como lo leí cuando era niña) y fui eligiendo las frases que más me gustaron.


El Principito es una fábula infantil escrita e ilustrada por el propio Antoine de Saint-Exupéry  (Lyon, 29 de junio de 1900-isla de Riou, 31 de julio de 1944) 

Se trata de una historia narrada por el Aviador, un adulto a quien le es difícil entenderse con sus contemporáneos. En un vuelo solitario, su avión se estropea y tiene que hacer un aterrizaje de emergencia en el desierto del Sahara. Ahí conoce al Principito, un niño que viene de un planeta tan pequeño que sólo tiene tres volcanes, algunos baobabs enanos y una flor. El Principito le pide que dibuje un cordero para llevarlo a su mundo. Después de hacerse su amigo, le cuenta qué solo se encontraba hasta la llegada de la Flor. Una hermosa flor que ama al Principito pero a quien le resulta difícil expresar sus sentimientos con sinceridad. Como tiene dudas sobre el amor de la flor, el Principito abandona su asteroide y recorre diversos mundos habitados por curiosos personajes como el rey, el vanidoso, el bebedor, el farolero y el geógrafo. Llega por fin a la Tierra, donde conoce a la serpiente y al zorro, con el que llega a establecer un vínculo muy especial. Es de su amigo el zorro de quien aprende que “sólo se ve bien con el corazón, lo esencial es invisible a los ojos”. 

Después de todas esas peripecias el Principito regresa al desierto del Sahara, se hace amigo del Aviador y le cuenta sus aventuras. Cuando el Aviador logra reparar su avión, la serpiente muerde al Principito que regresa a su planeta para cuidar a su flor. El Aviador, entonces, descubre que el Principito ha logrado llevarse consigo el dibujo del cordero, pero observa que no se ha llevado el bozal para amarrarlo. Así que se queda con la duda de si el cordero puede o no comerse la flor. Por eso, invoca a quienes lean el libro a avisarle en caso de que el Principito vuelva a la Tierra.



Volviendo a nuestro mueble... os enseño algunos detalles más del proceso.

  



Todo el mueble esta realizado con pinturas a la tiza de la marca Fleur y, por supuesto, todo pintado a mano.




Básicamente las pinturas que he usado son éstas.

Tanto para el interior como para el exterior, he usado dos tonos que me gustan muchísimo combinados: el James Taupe y Taupe Sophistication.

El puntito de color, se lo dí en los cajones. 

He terminado todo el mueble con dos manos de barniz mate (aunque en las fotos se ve algo de brillito) y una mano de cera. Si pudierais imaginar como huele cuando lo abres..... 


Bueno... os lo enseño y sigo detallando alguna otra cosilla.


Este es el mueble cerrado



 Y así me ha quedado abierto.




Los dos laterales y la puerta baja del frontal están decorados con la técnica del estarcido y una plantilla de rombos. Como no se me da extremadamente bien con el pincel plano propio del estarcido, lo hago con una esponja dando toquecitos, descargando mucho la cantidad de pintura, hasta que voy cubriendo toda la plantilla. Luego lo que hice fue desgastar mucho el color con una lija de grano fino para que el desgaste sea suave.






Aquí tienes un detalle del estarcido de la puerta de abajo.



Este es el pomo de las puertas. 


Lo hice a partir de una tablilla de madera como ésta. Dibujé un corazón lo corté y lo pinté con el mismo tono que usé para el estarcido de los rombos y el interior del mueble. Escribí a mano alzada el nombre de mi blog, lijé un poco para desgastar, envejecí las uniones de las tablillas para darle un toque rústico y el resultado es el que veis. 

Entre la puerta y cada una de las mitades del corazón puse una pieza de madera para poder facilitar la apertura.

Aquí se ve un poco a lo que me refiero y de paso veis el estarcido de uno de los laterales.





En el interior algo de color... y unas láminas que me encantan

   

Ésta es especial... ¡alguien sabrá porqué!




Cuando teñía el mueble así, pensé muchísimo si poner las frases, pero al final me dije "ahora va con frases y cuando me canse de ellas, lijo de nuevo un pelín y vuelvo a pintarlos"





Os acerco un poquitín las frases de los cajones



Y la frase del exterior del mueble... ¡todo un lema! 





Así queda en mi rincón




Por último..... ¿creéis que se puede trabajar así??
Calorcito dan, eso sí. 
Y, como una vez que se acomodan, no se mueven mucho, pues...  tampoco molestan demasiado.
(bueno, la verdad: nunca me molestan)



Buenooooooo, me alegro de estar otra vez de vuelta en "casa".

Espero que no se os haya hecho muy larga la entrada.

Si os ha gustado mi "mueblito" necesito que me lo digáis
porque vuestros comentarios y opiniones son los que van dando vida a mi Rincón.  

GRACIAS

Os mando un abrazo mu apretao y un besito